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Una de les sessions de simulació a l'Institut Cal·lípolis de Tarragona

UManresa forma equipos docentes de formación profesional en el uso de la simulación

El Centro de Innovación en Simulación de UManresa (CISARC), a través del Centro de Innovación y Formación en Educación (CIFE), ha formado a 16 docentes del Instituto Cal·lípolis de Tarragona en la metodología de la simulación. Este curso escolar es el primero en el cual el CISARC de respuesta a la demanda de centros de formación profesional interesados en introducir la metodología de la simulación en las aulas ya que, hasta ahora, los destinatarios principales de sus cursos eran sobre todo hospitales y empresas. Los primeros contactos con los centros educativos ya se realizaron durante el curso pasado. El Departamento de Educación promovió la realización de distintas formaciones en Cataluña con el objetivo de extender el uso de esta metodología entre los docentes que imparten formación en ciclos formativos, especialmente del ámbito sanitario. Con la realización de estos cursos, UManresa contribuye a la mejora de la calidad de la docencia en la formación profesional en el conjunto del país a través de una metodología formativa propia en la cual el CISARC y sus profesionales son expertos. 

Durante la formación que se ha desarrollado en Tarragona este mes de febrero, los docentes han aprendido a generar entornos inmersivos y de aprendizaje estimulantes, han trabajado específicamente la aplicación de la metodología en la formación profesional, han adquirido conocimientos para generar experiencias de simulación en el centro y han trabajado como realizar un buen debriefing posterior a la realización de la simulación.

Una metodología que ayuda a adquirir competencias profesionales


La coordinadora pedagógica del Instituto Cal·lípolis, Carme Prades Mulet, ha explicado que la intención del centro es que la metodología de la simulación se incorpore como una herramienta de aprendizaje en el ciclo formativo de grado medio de emergencias sanitarias, con la voluntad, más adelante, que sea "transversal en todas las familias profesionales de nuestro centro: sanidad, imagen personal y actividades deportivas". Según Prades, la simulación ofrece muchas posibilidades porqué "es una herramienta formativa muy potente, hace que el alumnado reflexione sobres su práctica, incrementa la comprensión y la retención de conceptos teóricos, permite la consecución de competencias clave y genera un clima de colaboración en el aula". 

Este centro, que ya hace años que ha incorporado metodologías de carácter competencial en el aula, fue la sede de uno de los cursos que, a través del Departamento de Educación, se llevaron a cabo en distintos puntos del país para impulsar el uso de la simulación y darla a conocer entre el profesorado de formación profesional, especialment del ámbito de las ciencias de la salud. Fue a través de este primer contacto con la metodología que el centro optó por continuar apostando por la formación de los docentes en simulación. El Instituto Cal·lípolis recibió una beca de 55.000 euros del Ministerio de Educación para habilitar una aulta tecnológica como aula de simulación, pero, para disponer de unas instalaciones como estas, es necesario tener personal preparado para utilizarla. Saí pues, para ponerla en marcha, era necesaria una formación específica de los docentes, de manera que fuesen capaces de incorporar la metodología dentro del modelo de enseñanza-aprendizaje del centro, explica Carme Prades.  

La simulación en la Formació Professional

Antoni Llobet, adjunto a Dirección general de la Fundació Universitària del Bages (FUB) y responsable del CIFE, valora la contribución que el campus Manresa de la UVic-UCC realiza en el ámbito de la formación de maestros y profesorado tanto del territorio como del conjunto del país. "La simulación ofrece a los docentes un cambió de visión, poniendo al alumno en el centro en el proceso de aprendizaje", explica Aida Camps, responsable del CISARC de UManresa. A diferencia de otras formaciones enfocadas al entrenamiento de profesionales, esta se centra en el aprendizaje y en facilitar herramientas a los docentes que la favorezcan.

La simulación tendría que ser una metodología imprescindible en la formación de todos los profesionales del ámbito clínico, explica Aida Camps, especialmente cuando se trata de intervenciones que tienen incidencia en la seguridad del paciente. El uso de la simulación permite reducir la distancia existente entre la teoría y la práctica y mejora la consolidación de los aprendizajes. Desde el punto de vista del alumnado, haber recibido formación siguiendo la metodología de la simulación permite dar un salto al ámbito profesional con mucha más seguridad. 
 

Formación por encargo del Departamento de Educación 

Entre el curso pasado y el actual, a través del Departamento de Educación, el CISARC impartió formación en simulación en los territorios de Barcelona, Tarragona, la Catalunya Central, el Vallès Occidental, Lleida y Girona. De 40 horas de duración, cada curso incluía sesiones virtuales sincrónicas y sesiones presenciales. Las sesiones presenciales se desarrollaron en centros de Formación Profesional del territorio y estuvieron a cargo de un equipo de profesionales del CISARC, que se desplazó. El curso de la Cataluña Central se desarrolló en las instalaciones del CISARC, ubicadas en el edificio de la Clínca Universitaria de UManresa - FUB. 

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