La evaluación de competencias del grado en Enfermería de UManresa cumple cinco años
139 estudiantes de cuarto curso del grado en Enfermería de la Facultad de Ciencias de la Salud de Manresa han participado este curso en las ECOE (Evaluación Clínica Objetiva Estructurada). La Evaluación Clínica Objetiva y Estructurada (ECOE) es una metodología de evaluación que simula situaciones clínicas reales para valorar las competencias del alumnado de forma sistemática, objetiva y equitativa. Se trata de un sistema basado en escenarios prácticos en los que el estudiantado debe demostrar habilidades como la comunicación, la relación con pacientes y la ejecución de técnicas clínicas. La Facultad de Ciencias de la Salud de Manresa fue pionera en la implantación de estas pruebas, que este curso cumplen cinco años desde su primera edición como prueba piloto.
En esta ocasión, el alumnado del último curso de Enfermería ha tenido que ir resolviendo diferentes situaciones y pruebas. En total, han pasado por 10 estaciones para demostrar sus habilidades en comunicación, trabajo en equipo, ética y seguridad profesional, liderazgo y procesos y técnicas vinculadas a la profesión. Estas pruebas se han desarrollado en el centro de innovación en simulación, CISARC Simulación, de UManresa, utilizando tanto actores como simuladores.
Una herramienta clave para asegurar la adquisición competencial
Desde su primera aplicación como prueba piloto, las ECOE se han consolidado como una herramienta fundamental del sistema de evaluación competencial del grado en Enfermería de UManresa. Actualmente, estas pruebas se llevan a cabo en dos fases clave del recorrido académico: en segundo y en cuarto curso.
En segundo, el objetivo principal es diagnosticar el nivel competencial alcanzado en el ecuador de los estudios. Las pruebas permiten detectar fortalezas y áreas de mejora tanto a nivel individual como colectivo. El estudiantado recibe un informe detallado que sirve como guía para orientar su proceso de desarrollo durante el resto del grado. A su vez, el equipo docente obtiene una visión clara sobre la eficacia del modelo formativo y puede realizar ajustes pedagógicos basados en evidencias.
En cuarto, las ECOE se convierten en una prueba de alto impacto: superarlas es un requisito para la obtención del Prácticum final. En este momento, las pruebas adquieren una función certificadora, ya que permiten validar si el estudiantado ha alcanzado las competencias necesarias para ejercer como profesional de la enfermería. Este planteamiento da continuidad al trabajo iniciado en segundo curso y permite medir la evolución del alumnado a lo largo de los cuatro años de formación.
La aplicación de las ECOE en estos dos momentos también favorece la toma de conciencia sobre las propias habilidades y responsabiliza al estudiante de su propio proceso de aprendizaje.
En los cinco años de implantación de las ECOE, la Facultad de Ciencias de la Salud ha evaluado 287 estudiantes de cuarto curso y 497 de segundo. Estas evaluaciones son posibles gracias a la implicación de los evaluadores de las estaciones, profesionales de enfermería del centro y profesionales vinculados a la práctica clínica que aportan su visión experta. Con el objetivo de mejorar la metodología, el equipo responsable de las ECOE analiza cada año su funcionamiento. Este análisis sirve para ajustar tanto las estaciones como las evaluaciones con el fin de que sean lo más realistas posible y respondan a las necesidades de un entorno cambiante. Este análisis incluye la visión de los evaluadores, pero también la de los actores y actrices que intervienen en las simulaciones.