Un accidente entre un coche y un autocar con 58 víctimas. Este fue el escenario simulado en el que tuvieron que trabajar los 27 estudiantes del Máster en Emergencias Extrahospitalarias y los 25 del Curso de Incidentes con Múltiples Afectados y Catástrofes de la Escuela de Posgrado en Salud de Manresa. El objetivo del equipo docente se cumplió: conseguir desbordar a los equipos de emergencias a la hora de hacer el triaje y la atención sanitaria a las víctimas del accidente, que eran medio centenar de personas voluntarias.

La simulación del siniestro se inició hacia las diez de la mañana. En el escenario de los hechos, el vehículo siniestrado había chocado contra un edificio, mientras que el autocar se había desplazado y había quedado separado del coche, con medio centenar de personas atrapadas en su interior y con la dificultad añadida de una mancha de aceite bajo el vehículo, que los miembros del cuerpo de Bomberos tuvieron que resolver antes de poder acceder al interior. Fue a partir de entonces cuando sanitarios y cuerpos de emergencia pudieron empezar a trabajar en el triaje y evacuación de las personas que habían quedado atrapadas, con imprevistos como la presencia de una reportera de televisión que interfería en la intervención, o personas que se escapaban de los puntos de concentración de heridos para localizar a amigos o familiares que seguían atrapados dentro del vehículo. La coordinadora del simulacro, Aina Pagès, valoró positivamente el ejercicio, teniendo en cuenta el objetivo de desbordamiento inicial que se perseguía. Según Pagès, “a pesar del sobrepaso, los Bomberos han actuado muy bien y han podido poner en práctica muchos de los conocimientos impartidos durante la formación, mientras que el alumnado sanitario ha vivido una situación más caótica que requerirá una reflexión”.

Una vez finalizado el simulacro, todos los estudiantes y el profesorado evalúan la actuación en un debriefing, que sirve para analizar en qué aspectos se han cometido errores y cómo se podría haber actuado para mejorar la atención a las víctimas.

El simulacro ha contado, un año más, con la colaboración del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), Transporte Sanitario de Cataluña (TSC), la Agrupación de Defensa Forestal de Manresa (ADF), Protección Civil, Cruz Roja, Sagalés, Desguaces del Bages, ADESAN, Fundación Turismo y Ferias de Manresa y el equipo de maquilladoras de Esther Castellana.

Esta ha sido la decimotercera edición de un simulacro que, con los años, ha ido perfeccionando la logística y la operativa para recrear diversos escenarios de incidentes con múltiples víctimas y catástrofes, como atropellos masivos, accidentes de globos aerostáticos, incendios en lugares como un centro de acogida de refugiados o en una residencia de personas mayores, una explosión en una residencia universitaria, un accidente ferroviario o el colapso de un escenario en un concierto multitudinario.